La Influencia Electrónica en Linkin Park: Un Homenaje a Chester Bennington
Hoy, 20 de marzo, recordamos a Chester Bennington en el día de su nacimiento. Su inconfundible voz marcó a toda una generación y llevó a Linkin Park a lo más alto de la música. Aunque la banda es conocida por su fusión de rock y nu-metal, también tuvo una fuerte relación con la música electrónica, la banda nunca tuvo miedo de experimentar con otros sonidos, combinaba sintetizadores, efectos glitch, bases rítmicas programadas e incluso influencias del dubstep y la música dance. Esta exploración culminó en su colaboración con Steve Aoki en A Light That Never Comes, un tema que combinó la energía del EDM con la intensidad emocional de la voz de Chester.
La electrónica desempeñó un papel clave en los álbumes A Thousand Suns (2010) y Living Things (2012). Aquí te dejamos algunos de los temas en los que Linkin Park exploró este sonido:
A Thousand Suns (2010):
The Catalyst – Usa sintetizadores, efectos glitch y una base rítmica electrónica.
Blackout – Vocoder, distorsión y un drop inesperado que recuerda al dubstep.
Wretches and Kings – Hip-hop con beats electrónicos e influencias industriales.
Living Things (2012):
Burn It Down – Un himno electro-rock con melodías sintéticas pegajosas.
Lost in the Echo – Bases glitch y efectos vocales que refuerzan su energía.
Lies Greed Misery – Sonidos agresivos con tintes de trap y electrónica experimental.
Su legado sigue vivo, inspirando a nuevas generaciones de artistas y fans.
Hoy lo recordamos con la misma pasión con la que él vivió la música. ¡Gracias, Chester!