Hay festivales que duran unas horas y hay otros que se convierten en energía. Day Zero pertenece a esa segunda especie: nació del fuego, del misticismo y de la necesidad de transformar la música en un ritual colectivo.
Y ahora, una década después de su nacimiento en la selva de Tulum, el universo de Day Zero expande sus coordenadas hacia uno de los puntos más espirituales del planeta: Bali.
El próximo 17 de abril de 2026, la isla indonesia será el escenario de una nueva experiencia sensorial bajo el lema “Journey to the Center of the Universe” (Viaje al centro del universo).
🔮 DEL CORAZÓN DE TULUM AL ESPÍRITU DE BALI
Hace más de diez años, en la selva maya, Damian Lazarus encendió una llama que redefinió la escena electrónica mundial: Day Zero.
Más que un evento, fue —y sigue siendo— una ceremonia. Un encuentro donde la naturaleza marca el tempo, la música se vuelve mantra y la comunidad respira al mismo pulso.
“Day Zero nació en Tulum como un experimento espiritual entre música, naturaleza y comunidad. Llevar este ritual a Bali es un sueño que conecta dos mundos ancestrales. Es un nuevo despertar para el festival y para todos quienes lo vivimos”, contó Damian Lazarus.
🌅 BALI 2026: UN PUENTE ENTRE DOS MUNDOS
El próximo capítulo de Day Zero es mucho más que un cambio de locación. Después de expandirse por Brasil y consolidarse como un fenómeno global, el festival inicia su primera edición asiática en Bali, un territorio que vibra con la misma energía ritual que dio origen a Tulum.
“México vio nacer una de las experiencias musicales más simbólicas del planeta. Bali representa su renacimiento. Estamos creando un capítulo profundamente sensorial, cargado de arte, energía y una visión que trasciende lo sonoro”,
explicó Yalia Bailleres, directora de operaciones en Lostnights, productora mexicana detrás del evento.
Bali es un espejo ritual: agua, fuego, silencio y ritmo. Un lugar donde la noche se vuelve templo y la música, una ofrenda.
🌀 UN VIAJE SENSORIAL AL CENTRO DEL UNIVERSO
El concepto “Born in Tulum, Reborn in Bali” (Nacido en Tulum, renacido en Bali) resume el espíritu del 2026: un renacimiento. No es un simple traslado geográfico; es un salto dimensional. La curaduría musical, la dirección artística y la producción —a cargo de Lostnights— mantendrán la misma visión que convirtió a Day Zero en una experiencia de culto: tecnología avanzada, arte orgánico y una narrativa que mezcla raíces ancestrales con futurismo digital.
En palabras de su equipo creativo, Bali se convertirá en un espacio donde el tiempo deja de existir, donde cada beat se sincroniza con los elementos, y donde el público no solo baila: trasciende.
⚡ DE MÉXICO PARA EL MUNDO
Llevar Day Zero fuera de Tulum es también llevar la identidad mexicana a un escenario global. Desde la visión estética hasta la forma de entender el entorno natural, todo lo que define al festival tiene ADN local.
Por eso, Day Zero Bali 2026 no es solo un nuevo destino: es la confirmación de que la creatividad y la producción hechas aquí pueden reescribir la historia de la música electrónica en cualquier punto del planeta.
El ritual continúa.
El universo se expande.
Y el próximo destino está en Bali.
