Después de años conquistando los charts del pop y los festivales con sonido más comercial, Tiësto acaba de hacer lo que muchos fans esperaban (y pocos creían posible): volver al trance.
Su nuevo sencillo, “Bring Me To Life”, marca un reencuentro con las raíces que definieron su carrera a inicios de los 2000. Y lo hace con todo lo que esperas de una buena producción trance: atmósferas expansivas, voces etéreas y esa sensación de que el drop no es solo sonido, sino liberación.
🔊 UN REGRESO QUE SUENA A CLÁSICO
“Bring Me To Life” no es solo un guiño nostálgico; es una declaración. La canción, lanzada bajo su sello Musical Freedom, combina melodías ascendentes, sintetizadores arpegiados y un vocal femenino que evoca sus himnos más icónicos como “Adagio for Strings” o “Just Be”.
El track marca una ruptura temporal con su línea reciente de house festivalero y regresa al formato introspectivo, de build-ups largos y emociones amplias.
🕺 UN CÍRCULO QUE SE CIERRA
Lo que hace especial este regreso no es solo la música, sino el contexto. Tiësto ha sido —y sigue siendo— un puente entre generaciones. Y este nuevo capítulo no se siente como un regreso nostálgico, sino como una reconexión con el alma de su sonido.
“Bring Me To Life” suena a lo que muchos sintieron cuando descubrieron el trance por primera vez: libertad, introspección y energía que se expande en cada compás.
Más que un single, es un recordatorio de que las raíces nunca se olvidan.




