Wat Samphran, el dragón que custodia el templo 

A unos 40 kilómetros al oeste de Bangkok se encuentra un templo que no siempre aparece en las guías de viaje pero que se ha convertido en uno de los más buscados por los turistas en Tailandia.

Wat Samphran o el Templo del Dragón, en la provincia de Nakhon Pathom y registrado oficialmente en 1985, no es el más antiguo, bonito o mejor conservado de entre los templos budistas pero su construcción cilíndrica rodeado por un dragón gigante si lo convierten en uno de los más visitados. El edificio de color rosa tiene 17 pisos y una altura de 80 metros, en homenaje, según cuenta la leyenda, a la edad que tenía Buda cuando murió.

Dicha escultura está hueca y es por su interior, en un tramo de escaleras en espiral, por donde se accede al piso superior del edificio. Desde aquí se pueden contemplar las vistas de la ciudad así como una enorme estatua de Buda.

El interior del edificio tampoco deja indiferente. Al entrar, el turista se sorprende con un ataúd y las fotos de un monje difunto. Cuenta la leyenda que se trata del ex monje Phra Jam Long, quien empezó la construcción del templo y tras terminar la construcción en 1985, con el fin de limpiar el lugar, pasó 38 días en el ataúd sin respirar y sin que su corazón latiera, para después despertar.

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